Por qué estoy tan segura de poder serle de ayuda…

Todo empezó hace más de 50 años…

Mi abuela era médium. Mi madre era médium. ¡Y yo soy médium!

Ya de muy pequeña empecé a sentir esas presencias benéficas a mi alrededor. Hoy las llamo “mis energías positivas invisibles” o mis “fuerzas de luz“.

Entonces no comprendía por qué era diferente de las demás niñas. Podía sentir todo lo que me rodeaba. Al cruzarme con otra persona podía percibir su aura, su luz. Igual que si fuera una corriente eléctrica, podía sentir las ondas positivas o negativas que emitía esa persona.

Con el paso de los años el fenómeno se fue intensificando. Empecé a percibir fuerzas más inmateriales, como por ejemplo las corrientes de suerte. Después aprendí a controlarlas. Muy pronto conseguí atraer las energías positivas y alejar las energías contrarias.

Y, puesto que el universo no es más que energía, me convertí en un verdadero imán para la energía positiva.

Enseguida usé mis dones para ayudar a mi familia y, después, a mis amigos. Sin embargo, jamás los he podido utilizar en mi propio beneficio.

Llegó el momento de mi matrimonio y el nacimiento de mis hijos… tras una vida agitada me divorcié con 40 años y me vi sola con 3 hijos y sin ningún tipo de ayuda ni pensión alimentaria. Por eso sé lo que es sentirse sola y abandonada…

¡Por qué estoy tan segura de poder serle de ayuda!

Porque después de todos estos años dedicados a ayudar al prójimo, domino a la perfección el don que me fue concedido. Mis “Fuerzas de Luz” no me han abandonado jamás.

Hoy tengo más de 70 años y sigo con la misión de mi vida: en un mundo cada vez más difícil, no pasa un día sin que busque a personas merecedoras que necesiten una ayuda positiva.

Mi objetivo: “Permitir que usted atraiga la suerte a su vida. Alejar de usted las fuerzas negativas que operan en su contra”.

Eso es, ¡ahora ya lo sabe prácticamente todo acerca de mí, de mi vida y de mi trayectoria!

Una cosa más que querría decirle…

Como puede ver, yo misma he atravesado momentos difíciles. Sé lo que significa estar sola, abandonada por todos, sin dinero y sin ninguna esperanza de salir adelante. Por eso soy la persona más adecuada del mundo para comprender sus problemas y ayudar a que los supere, gracias a mis conocimientos y a los increíbles poderes que mis “Fuerzas de Luz” me han permitido dominar.

Enseño Tarot, péndulo, magnetismo, numerología. Pero la mayor parte del tiempo, ayudo a quienes recurren a mí para resolver un problema, sea cual sea. Tengo ese poder.

Por eso, si hoy tiene usted un problema que le causa obsesión y le amarga la vida, puede recurrir a mí. Yo encontraré la solución. Puede confiar en mí. Llevo más de 58 años ejerciendo, cientos de personas han confiado en mí. Puede encontrar algunos extractos de testimonios aquí.

Puede confiar en mí con total tranquilidad y sin ningún temor.

Su sincera amiga,